El año 1986 marca un hito en la historia del planeta. Tras más de cinco mil años de ausencia, la magia regresa a la Tierra con el paso del cometa Halley. Este evento cósmico no solo es recordado por su espectacular aparición, sino por el despertar de las fuerzas mágicas en todo el mundo. Individuos en diversas regiones comenzaron a manifestar poderes místicos, señalando el comienzo de una nueva era donde la magia y la realidad se fusionan. Durante siglos, las energías arcanas habían permanecido dormidas, pero el cometa actúa como un catalizador, permitiendo que la magia resurja con fuerza.
A la vez, el desastre de Chernóbil no solo deja una cicatriz nuclear en Europa del Este, sino que también desencadena una serie de fenómenos mágicos en la zona de exclusión. Los primeros informes de "anomalías" en el área sugieren que la radiación ha desatado fuerzas más allá de la comprensión científica. El área se convierte en un foco de investigaciones mágicas clandestinas.

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Durante los años 90, la coexistencia de la magia y la tecnología comienza a afianzarse. Los avances tecnológicos, como el auge de internet y las telecomunicaciones, están acompañados de descubrimientos mágicos. La magia y la ciencia comienzan a integrarse en varias partes del mundo, aunque en muchos casos, de manera clandestina o limitada a ciertos círculos de poder. 

En la primera década del nuevo milenio, comienzan a aparecer los primeros metahumanos. Considerados como mutaciones o monstruos en un principio, poco a poco se integraron en la sociedad. Las grandes corporaciones tecnológicas empiezan a darse cuenta del poder que ofrece la magia. Mientras la tecnología avanza rápidamente, se producen descubrimientos sobre cómo combinarla con energías arcanas. Las corporaciones más poderosas comienzan a utilizar magia en secreto, generando una nueva lucha por el poder. A partir de este momento, las Megacorporaciones emergen como las principales entidades de control tanto tecnológico como mágico.

En este año, una catástrofe mágica ocurre en Europa. Un ritual fallido realizado por una facción de magos y científicos provoca la liberación de una energía incontrolable, afectando a varias ciudades. Las consecuencias políticas y sociales son devastadoras, con miles de personas manifestando habilidades mágicas sin control, lo que lleva a la creación de leyes internacionales sobre el uso de la magia. Los gobiernos y las corporaciones intensifican sus esfuerzos por controlar estos nuevos poderes

En el año 2020, la humanidad enfrenta una nueva crisis en forma de un extraño virus que azota a la población mundial. Mientras las naciones luchan por contener la enfermedad, surgen tensiones raciales alimentadas por el miedo y la incertidumbre. Grupos radicales comienzan a culpar a los metahumanos, seres que, desde la década del 2000, se han integrado en la sociedad. Se intensifican las tensiones entre los humanos y las razas metahumanas, como los elfos, orcos y trols, que son vistos por algunos como responsables del caos. Esta crisis marca el inicio de una era de creciente discriminación y violencia hacia los metahumanos.

Durante la década de 2030, el mundo es sacudido por una gran crisis geopolítica que cambia radicalmente el orden mundial. La revelación de la existencia de los dragones prime, seres antiguos y poderosos que han estado ocultos durante milenios, desencadena una serie de eventos que sacuden las fundaciones de las naciones modernas. Países enteros se fragmentan mientras otros se unifican, y en este caos, antiguos reinos precoloniales de África, Asia y América del Sur renacen, reclamando su lugar en un mundo transformado por la magia y los dragones.
Los dragones prime no solo poseen un poder físico y mágico inmenso, sino que también tienen agendas propias que se entrelazan con las luchas humanas por el control de la magia. Estos seres mitológicos emergen como jugadores clave en el equilibrio de poder global, desplazando tanto a las naciones como a las Megacorporaciones.
En paralelo, la influencia de los Eternos se hace más evidente, ya que estos seres inmortales, que han estado presentes a lo largo de la historia humana, juegan un papel decisivo en el control de la magia y la tecnología. Aunque la mayoría de la humanidad desconoce su existencia, los Eternos manipulan los eventos globales desde las sombras, manteniendo un equilibrio precario entre el caos y el orden. 

A mediados del siglo XXI, la competencia entre las Megacorporaciones se convierte en una lucha abierta por el control de los recursos mágicos y tecnológicos. Estas entidades no solo luchan en el ámbito comercial, sino también a nivel militar y mágico. Las grandes ciudades del mundo son testigos de enfrentamientos entre fuerzas corporativas que utilizan tanto tecnología avanzada como magia destructiva para ganar territorio e influencia.
Durante esta época, las poblaciones comienzan a verse divididas entre aquellos que apoyan la expansión tecnológica sin restricciones y los defensores de la magia como una fuerza que debe ser respetada y protegida. Los gobiernos pierden cada vez más poder frente a las Megacorporaciones. 

En 2061, el cometa regresa al sistema solar, marcando otro evento cósmico de gran importancia. Esta vez, el paso del cometa provoca una amplificación masiva de la magia en la Tierra, incrementando su poder de forma descontrolada. Las energías arcanas fluyen con más intensidad que nunca, desatando una crisis global mientras las poblaciones luchan por adaptarse a este aumento. Los flujos mágicos incrementados amenazan con desbordar la capacidad de los hechiceros y las Megacorporaciones para controlar este poder, lo que lleva al surgimiento de nuevos peligros: criaturas arcanas, cataclismos mágicos y conflictos entre facciones por el control de estos recursos crecientes.
El impacto de este evento se siente en todo el mundo, mientras el equilibrio entre magia y tecnología comienza a tambalearse

Tres años después, en 2064, la humanidad enfrenta una nueva catástrofe: La Gran Solar. Una tormenta solar sin precedentes golpea La Tierra, causando un apagón mundial que deja inutilizada la mayor parte de la tecnología. La humanidad se ve empujada de regreso a un estado casi medieval, ya que los sistemas electrónicos fallan y las infraestructuras modernas colapsan. Este evento marca un reinicio forzoso, donde las Megacorporaciones y los gobiernos luchan por recuperar el control en un mundo donde la magia comienza a llenar el vacío dejado por la tecnología.
Sin embargo, esta crisis también marca el renacimiento del mundo virtual. A medida que las tecnologías comienzan a recuperarse, la red global de información, internet, se transforma en el Metaverso, un mundo virtual donde la magia y la tecnología se fusionan por completo. Este nuevo entorno digital es un reflejo de la realidad, donde los usuarios pueden manipular tanto las fuerzas tecnológicas como las arcanas. El Metaverso se convierte en el nuevo campo de batalla, donde las Megacorporaciones, los dragones prime, los Eternos y las facciones mágicas luchan por el control del futuro de la humanidad.

Hacia el año 2070, los avances tecnológicos alcanzan un punto donde la biotecnología y la cibernética se mezclan con la magia de manera indisoluble. Las razas metahumanas, que han convivido con los humanos desde hace décadas, ahora ocupan un lugar crucial en la sociedad, contribuyendo con sus habilidades únicas. La presencia de los elfos, orcos, trols y enanos junto a los humanos se siente en todas las esferas del poder, desde las corporaciones hasta las luchas por la libertad.
Hacia el año 2082, el mundo ha cambiado irreversiblemente. La magia y la tecnología, lejos de ser opuestas, ahora se complementan, formando el tejido que une a las civilizaciones modernas. Las ciudades son vastos paisajes de luces de neón, pantallas holográficas, y monumentos antiguos llenos de magia. La humanidad camina una delgada línea entre la destrucción y la trascendencia, mientras fuerzas antiguas y modernas chocan en un mundo donde los dragones prime, los Eternos y las Megacorporaciones buscan moldear el futuro a su favor.